“La música lo es todo para mí. He pasado por dos divorcios y un montón de problemas por la música, pero sigue siendo lo más importante del mundo para mí. Preferiría tener la música que cualquier otra cosa.”
Así habla Peter Tägtgren, músico, productor y cerebro creativo detrás de PAIN, el mayor exponente de metal industrial de Suecia. Su vida ha estado inmersa en la música, en llevar los límites al máximo y en explorar ideas hasta sus extremos lógicos e ilógicos. Ha sido una carrera que ha implicado liderar bandas, como los icónicos veteranos del death metal HYPOCRISY y ahora PAIN, o moldeando sus sonidos, como ha hecho con CELTIC FROST, CHILDREN OF BODOM, DIMMU BORGIR e IMMORTAL, entre otros. Este llamado lo ha convertido en uno de los músicos y productores más respetados de Europa. Tras un extenso ciclo de giras para el exitoso álbum “Cynic Paradise” de PAIN, Tägtgren volvió a HYPOCRISY, lanzó otro álbum y salió nuevamente de gira. Ahora, con el octavo álbum en camino, PAIN está listo para conquistar el mundo una vez más.
Aunque el sonido, por supuesto, permanece en su esquema característico, “You Only Live Twice” es, con diferencia, el esfuerzo más pesado y agresivo en la historia de la banda; las raíces de death metal del líder se hacen notar. Pero PAIN no sería PAIN si no hubiera canciones pegadizas y himnos, como el primer sencillo de éxito, “Dirty Woman”, que trata sobre el tipo de mujer implacable con la que el hombre promedio no querría encontrarse (véase la cita arriba). Ya sea pegajoso o brutal: ¡ponlo en alto y sumérgete en el lado más oscuro, pesado y agresivo de PAIN!
Tras el éxito del proyecto LINDEMANN de Peter junto al vocalista de RAMMSTEIN Till Lindemann, se retiró y tomó tiempo para escribir otra declaración de metal industrial titulada »Coming Home«. El lanzamiento de este álbum está programado para septiembre de 2016 a través de Nuclear Blast con un diseño de portada creado por Stefan Heilemann.
Es 2021 y una pandemia está asfixiando al mundo, y parece que nadie se está divirtiendo. Al parecer, el incansable fanático de la música Peter Tägtgren se muestra indiferente, ya que logra un gran éxito con - perdón por el lenguaje - un maldito pegajoso… bueno, himno de fiesta. Por supuesto, estamos hablando de la canción “Party in My Head” del proyecto de metal sintético de PAIN.
“Realmente no sé qué tiene ‘Party in My Head’ que hizo - y aún hace - que la gente se vuelva loca… Pero de lo que estoy seguro es que la canción ya ha sido disfrutada millones y millones de veces. ¡Las cifras son bastante alucinantes!”
“Por supuesto, PAIN no es ajeno a escribir música bailable y pegadiza, aunque metálica… Siempre ha estado en el ADN de este proyecto. Pero seamos sinceros: si el mundo realmente necesita ‘himnos de fiesta’ de un tipo cínico como yo, algo anda muy mal”, ríe Peter.
Nuestro querido planeta puede estar en problemas, pero parece que no hay nada malo en el mundo de PAIN ahora que 2024 avanza en el calendario. Simplemente no puede haber, porque el tan esperado nuevo álbum de estudio “I Am” está por llegar - sí, después de ocho años de espera.
“El álbum anterior, ‘Coming Home’, salió en 2016, y, por supuesto, le siguió una gira. En 2019, lancé un álbum llamado ‘F & M’ con el cantante de Rammstein, Till Lindemann, un proyecto que dejé en 2020. En 2021, fue el turno de mi banda de death metal Hypocrisy con un nuevo álbum ‘Worship’, y, por supuesto, volvimos a salir de gira. Si eso no fue suficiente, agreguemos un álbum de estudio con Joe Lynn Turner en 2022… En otras palabras, los últimos ocho años pasaron en un abrir y cerrar de ojos”, suspira Peter.
“Después de todo esto, era el momento perfecto para que PAIN volviera con todo. Estaba emocionado, por decir lo menos. Ni qué decir del éxito de ‘Party in My Head’, que dio al proceso del álbum un comienzo explosivo”
Vamos a aclarar algo: el poderoso “I Am” es realmente un misil musical versátil - si no el más versátil - en la rica discografía de PAIN. Las nuevas canciones van a todas partes con riffs industriales pesados, vibras melancólicas y ritmos llenos de groove, sin olvidar las sorpresas, por supuesto.
